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El Oceanogràfic de la Ciudad de las Artes y las Ciencias un auténtico parque marino que engloba los principales mares y océanos del planeta. Con una extensión 110.000 m2 y un volumen de 42 millones de litros (el equivalente a 15 piscinas olímpicas), constituye el mayor oceanario de Europa. Una visión precisa de los ecosistemas marinos y su gran biodiversidad, logrando transmitir la sensación única de sumergirnos en busca de los secretos del océano.

El Oceanogràfic de la Ciudad de las Artes y las Ciencias un auténtico parque marino que engloba los principales mares y océanos del planeta. Con una extensión 110.000 m2 y un volumen de 42 millones de litros (el equivalente a 15 piscinas olímpicas), constituye el mayor oceanario de Europa.

Una visión precisa de los ecosistemas marinos y su gran biodiversidad, logrando transmitir la sensación única de sumergirnos en busca de los secretos del océano.

El delfinario con capacidad para albergar más de una treintena de ejemplares, está destinado a la exhibición, mantenimiento y reproducción de un grupo de delfines.
Con un total de cinco piscinas, el delfinario se perfila como el más importante a nivel europeo. Aquí el público disfruta de las demostraciones de inteligencia de los delfines mediante una exhibición tan sorprendente como educativa.

Los diseños de las espectaculares cubiertas, que representan una figura de paraboloide hiperbólica similar a un nenúfar, obra póstuma del arquitecto Félix Candela, se conjugan en este gran complejo de concepción innovadora y estética exquisita, en cuya construcción se incorporan los avances tecnológicos más modernos con los 
últimos conocimientos sobre la fauna y flora marinas.

Durante la visita y a lo largo de nuestro recorrido, podremos conocer de cerca el comportamiento y forma de vida de los más de 45,000 ejemplares de 500 especies diferentes. Entre las especies de gran interés y expectación podréis observar tiburones, belugas, morsas, delfines, leones marinos, pingüinos, estrellas, erizos, gran variedad de crustáceos y peces así como las aves típicas de zonas húmedas, como las que viven en la Albufera de Valencia.